Estamos todos de acuerdo en que es bastante fácil diagnosticar un vértigo, aunque siempre estárá acechando el fantasma de: ¿…..y si es central?.
En ésta entrada expongo las pistas principales que nos pueden ayudar.

Una vez que hayamos descartado las sospechas del origen central, podemos pasar a decidir qué maniobra exploratoria es la más específica para el diagnostico del vértigo periférico. Pues bien, al repasar éste tema para la entrada del blog, cual ha sido mi sorpresa al descubrir que llevo años practicando la maniobra de Romberg a mis pacientes cuando tiene una sensibilidad de un 19%.
Los mejores predictores del vértigo son las características del nistagmus posicional (sensibilidad 90% y especificidad 63%), y la prueba de Dix-Hallpike del nistagmus provocado (sensibilidad 82% y especificidad 71%).

El tratamiento consistirá en hacer al paciente la estancia durante éstos días críticos, un poco más soportable:

Para los más osados, existen maniobras de recolocación de partículas. La más utilizada es la maniobra de Epley, que comienza de la misma forma que la maniobra de provocación de Dix-Hallpike. Os dejo un enlace de youtube donde se explica de manera más visual la maniobra:
https://www.youtube.com/watch?v=W4NKI9fufro&feature=emb_rel_end
Y para terminar, ¿qué hacemos con los vértigos que duran y duran……?. Pues bien, después de tratar la crisis aguda el paciente ya no presenta sensación de vértigo incapacitante, pero sí de inestabilidad y mareo. En ésta fase se desaconseja el uso de sedantes vestibulares, porque retrasan la aparición de mecanismos de compensación. Se utilizan fármacos vasodilatadores y rehabilitación:

Susana
https://amf-semfyc.com/web/article_ver.php?id=2417
https://www.fisterra.com/guias-clinicas/vertigo-posicional-paroxistico-benigno/
https://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-vertigo-mareo-13061903